La Administración Distrital de Medellín anunció este 28 de noviembre de 2025 un avance significativo en su estrategia de modernización urbana con la instalación de 2.218 luminarias inteligentes en el sistema de alumbrado público de la ciudad. Este proyecto busca transformar la infraestructura de iluminación tradicional en una red tecnológica interconectada que integra eficiencia energética y seguridad, consolidando a la capital antioqueña en su ruta hacia el modelo de una Smart City o ciudad inteligente.
El eje central de esta modernización es la implementación de la telegestión, una herramienta tecnológica que convierte a cada punto de luz en un nodo de información capaz de transmitir datos continuos sobre su estado y su entorno. Gracias a una red inalámbrica soportada en la nube, el sistema permite operar y monitorear las lámparas de manera remota y en tiempo real, ya sea desde un centro de control centralizado o mediante equipos portátiles, eliminando la necesidad de desplazamientos físicos para verificaciones básicas.
La adopción de esta tecnología permite a la entidad operadora encender, apagar, regular la intensidad, verificar voltajes e identificar fallas de conexión de forma inmediata. Al contar con sensores avanzados, el sistema tiene la capacidad de detectar el deterioro de los componentes y emitir alertas antes de que ocurra un daño definitivo, lo que facilita la priorización de las cuadrillas de reparación bajo criterios técnicos precisos. Esta capacidad predictiva agiliza la atención, reduce los costos operativos y mejora sustancialmente la disponibilidad del servicio para los ciudadanos.
Más allá de la iluminación, la infraestructura instalada posee la versatilidad para integrar otros dispositivos de monitoreo urbano, como cámaras de seguridad, sensores de calidad del aire y medidores de niveles de ruido. Según explicó Manuela García Gil, subsecretaria de Servicios Públicos, esta evolución permite que el alumbrado deje de ser un servicio aislado para convertirse en un componente clave de seguridad, movilidad y habitabilidad, anticipándose a los requerimientos del territorio en lugar de solo reaccionar ante ellos.
El impacto del proyecto también abarca la sostenibilidad ambiental, pues la modernización contribuye al ahorro energético y a la disminución de emisiones de CO2. Adicionalmente, la tecnología implementada ayuda a reducir la contaminación lumínica, lo que favorece la protección de la fauna nocturna en las áreas de influencia del sistema. Con el procesamiento de toda la información capturada en tiempo real, la ciudad refuerza su capacidad para supervisar diferentes aspectos del entorno urbano de manera eficiente y permanente.
