Este lunes 20 de enero, el gobierno de Gustavo Petro confirmó importantes cambios en su equipo de trabajo. Laura Sarabia, considerada la mano derecha del presidente, asumirá como la nueva canciller de Colombia, en reemplazo de Luis Gilberto Murillo, quien anunció su renuncia tras un desgaste en su labor diplomática.
La noticia fue confirmada por fuentes oficiales de la Casa de Nariño. Luis Gilberto Murillo, actual jefe de la diplomacia colombiana, permanecerá en su cargo hasta el próximo 31 de enero, cuando Laura Sarabia asuma oficialmente su nuevo rol. A las 4:00 p.m. de este lunes, se espera que el presidente Petro haga el anuncio desde el Palacio de Nariño.
Sarabia, quien ha acompañado al mandatario en numerosos viajes internacionales y ha consolidado relaciones con distintos sectores en el ámbito global, se convertirá en la canciller más joven en la historia del país. Sus principales retos serán fortalecer la integración latinoamericana, fomentar el diálogo y la cooperación regional, así como apoyar a empresarios colombianos en sus proyectos de expansión internacional.
El remezón no se limita a la Cancillería. Jorge Rojas, vicecanciller y uno de los hombres de mayor confianza del presidente Petro, asumirá como nuevo director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre), en reemplazo de Sarabia.
Por otro lado, el ministro de las TIC, Mauricio Lizcano, también presentó su renuncia este lunes, argumentando «un desgaste, pero con buenos resultados» durante su gestión. La continuidad de otros ministros, como el titular del Interior, Juan Fernando Cristo, se definirá en las próximas horas.
La renuncia de Murillo estaba prevista desde diciembre de 2024, cuando reveló a SEMANA su intención de dejar el cargo debido al desgaste acumulado durante su gestión. Tras consultarlo con su familia, Murillo informó al presidente Petro sobre su decisión en una reunión privada.
Sin embargo, tensiones diplomáticas con Venezuela relacionadas con la posesión del dictador Nicolás Maduro aplazaron su renuncia. Aunque su futuro aún es incierto, algunos analistas no descartan que Murillo explore una precandidatura presidencial de cara a las elecciones de 2026, aunque él mismo expresó su interés por regresar a la academia.
Los cambios en el gabinete reflejan un ajuste estratégico del presidente Petro para enfrentar los retos políticos y sociales de los próximos 18 meses de su gobierno. Con la llegada de nuevos funcionarios a posiciones clave, el Ejecutivo busca consolidar su agenda en temas prioritarios como integración regional, desarrollo tecnológico y relaciones internacionales.