El Gobierno del presidente Gustavo Petro estudia nuevamente la posibilidad de gravar con impuestos a las iglesias en Colombia. La medida, que en 2022 fue retirada de la reforma tributaria, ahora toma fuerza en el marco de los decretos de conmoción interior, con el fin de recaudar recursos para atender la crisis en el Catatumbo.
El ministro de Hacienda, Diego Guevara, reveló en entrevista con Portafolio que el Ejecutivo tiene en su agenda diversos planes para aumentar el recaudo, entre los que se incluye la aplicación de gravámenes a las iglesias. Aunque no es una propuesta nueva, su reactivación responde a la necesidad de obtener ingresos adicionales de manera inmediata.
¿Cómo serían los impuestos para las iglesias?
Aún no se han dado detalles sobre el tipo de gravámenes que se aplicarían, pero Guevara indicó que se basaría en los lineamientos de la reforma tributaria de 2022. En esa ocasión, se contempló un impuesto sobre la renta para aquellas comunidades religiosas que generan ingresos por actividades comerciales.
Es importante destacar que la propuesta de hace tres años excluía del cobro los recursos provenientes de las donaciones y los destinados a actividades religiosas, educativas y de beneficencia. Sin embargo, establecía impuestos del 20 % a los ingresos derivados de negocios alternos como:
- Barberías y peluquerías
- Cafeterías
- Centros vacacionales y hoteles
- Comercios y parqueaderos
- Librerías
- Estaciones de radio y canales de televisión
El Gobierno aún no ha oficializado cómo se implementaría la medida ni desde cuándo comenzaría a regir.
Decía la reforma tributaria del Gobierno Petro del 2022 que los impuestos a las iglesias en Colombia tenían que cobrarse sobre la renta y con una tarifa preferencial del 20 %.
