Estados Unidos dio un nuevo paso en su ofensiva contra el régimen de Nicolás Maduro al declarar este viernes al Cártel de los Soles como una organización terrorista. La decisión fue anunciada por la Oficina del Departamento de Estado para Latinoamérica, que afirmó que este grupo, presuntamente dirigido por altos funcionarios del Gobierno venezolano, es una amenaza directa para la seguridad de la región y de los ciudadanos estadounidenses.
Según el comunicado oficial, el Cártel de los Soles está vinculado con el Cártel de Sinaloa y con el grupo criminal transnacional Tren de Aragua, ambas organizaciones también designadas recientemente como terroristas. Las autoridades estadounidenses aseguran que esta red está “administrada por el dictador Nicolás Maduro” y que colabora con grupos que “invaden nuestro país para traficar narcóticos, enriquecerse e infligir violencia contra las comunidades”.
La inclusión del Cártel de los Soles en la lista de entidades terroristas permite al gobierno estadounidense activar una serie de medidas legales, financieras y diplomáticas para desmantelar sus operaciones y congelar cualquier activo bajo jurisdicción estadounidense. Esta clasificación, según las autoridades, busca frenar el presunto enriquecimiento ilícito de Maduro a través de una red de narcotráfico que impacta directamente en la salud pública y la estabilidad hemisférica.
Washington ha sostenido por años que el Cártel de los Soles está conformado por funcionarios del Gobierno venezolano y miembros de la cúpula militar. Durante la primera administración de Donald Trump (2017-2021), el Departamento de Justicia presentó cargos por narcoterrorismo contra Maduro y varios colaboradores, acusándolos de facilitar el envío de toneladas de cocaína a Estados Unidos, en colaboración con las disueltas FARC de Colombia.
La acusación más grave señala que Maduro negoció personalmente con grupos armados colombianos el suministro de drogas, además de proveerles armamento militar. Asimismo, habría coordinado operaciones con otros países de Centroamérica, como Honduras, para ampliar la ruta del narcotráfico hacia territorio estadounidense. Uno de los implicados, el exgeneral Hugo “el Pollo” Carvajal, se encuentra detenido en EE.UU. tras ser extraditado desde España, y enfrenta un juicio por estos delitos.
Desde Caracas, el Gobierno venezolano ha rechazado las acusaciones, calificándolas de injerencistas y parte de una campaña de agresión internacional. El canciller venezolano, Yvan Gil, incluso ha negado la existencia del Tren de Aragua, calificándolo como una “ficción mediática” promovida por medios internacionales y gobiernos opositores.
Esta nueva medida profundiza la tensión entre Washington y Caracas y se da en un momento en que las relaciones diplomáticas entre ambos países siguen congeladas. La calificación del Cártel de los Soles como grupo terrorista marca un nuevo capítulo en la política exterior estadounidense hacia Venezuela y reafirma la postura de sectores republicanos que han solicitado esta acción desde hace años.
