Por: Federico Senior
Aunque pareciera lo contrario, la verdad es que, aun siendo un enorme bulto cancerígeno, sin embargo, su malignidad no ha traspasado el epitelio de su estupidez y es gracias a ella (a la estupidez) que, para fortuna de nuestra sociedad, toda esa podredumbre se concentra todavía en su pestilente forúnculo.
Tarea difícil, encontrar en nuestro presidente habilidades notorias, me refiero a las productivas, puesto que de las destructivas hasta creador de algunas es su autor, verbigracia la muy exitosa de destruir el sistema de salud, como atleta olímpico de las carreras con vallas, ha ido saltando todos los obstáculos con kanguresca habilidad, situando hoy día al sector al borde del colapso y ad portas de causar una mortandad mucho peor que la del COVID, habiéndole importado un comino el infructuoso trámite en el parlamento, un bledo las órdenes de las altas cortes y poco menos que un pito, las súplicas de la población, víctima de su porfía.
Además de todo, ya de sobra lo sabemos, la educación, las fuerzas armadas, el sector energético, el campo, el orden público, su propio entorno gubernamental, todo anda manga por hombro, a lo que él solo responde con interminables arengas televisadas, que solo ven sus embrutecidos cortesanos (que quien sabe si tal vez, porque bien aburridas son esas diatribas, que de seguro son de muy poco agrado para sus alelados áulicos) y los periodistas de todo pelambre, puesto que son fino combustible, para la fogata diaria en la que calientan su audiencia todos los medios.
Petro es un tumor que no ha hecho metástasis, evidente prueba y más que contundente lo es la descertificación que acaba de promulgar el gobierno de los Estados Unidos, ésta, ha sido de manera exclusiva una sanción para el presidente Petro y su atroz gobierno, no toca para nada lo que podría perjudicar de manera directa a la población, obvio que se produce un daño colateral (que puede ser muy fuerte) como lo es la perdida de confianza a nivel financiero internacional, se eleva el valor del riesgo país, por tanto los intereses de la deuda, la cual la pagamos todos, pero, reitero, de manera directa, el gobierno Trump no “toca” al pueblo, solo “castiga” al gobierno actual y por y ante todo a su cabeza el Señor Petro.
En pocas palabras, los americanos nos están diciendo, Petro es un cáncer maligno, ojo, pero todavía está encapsulado, la decisión de no permitir que la devastación se “riegue” a todos los ámbitos de la sociedad, radica en ella misma, en la sociedad civil, en impedirle a la banda que nos gobierna continuar con su proyecto destructivo, por tanto todos los demócratas, los que defendemos la libertad, seremos los cirujanos que extirparemos ese tumor, votando por la opción libertaria, aplastando la propuesta progresista, y evitando que el país se desbarranque hacia ese vacío sin fondo, que propician las dictadura opresoras cuyo único fin, es el poder, el enriquecimiento personal y la siembra de la penuria y la desesperanza en los pueblos sometidos a su yugo.
