Nicolás Maduro, quien fue juramentado este viernes como presidente de Venezuela para el período 2025-2031, rechazó contundentemente el llamado del expresidente colombiano Álvaro Uribe a una “intervención internacional” en el país, asegurando que los venezolanos no desean más violencia ni sanciones.
«Nadie quiere la intervención militar a la que llama Uribe. Nadie quiere más sanciones, nadie quiere más violencia. Los venezolanos quieren democracia, libertad, entendimiento, armonía, reconciliación y reencuentro,» declaró Maduro durante su intervención en el Festival Mundial Internacional Antifascista, organizado por el chavismo tras su toma de posesión.
Desde Cúcuta, ciudad fronteriza con Venezuela, el expresidente Álvaro Uribe solicitó este sábado una intervención internacional que cuente con el respaldo de las Naciones Unidas para desalojar del poder a Maduro.
«Pedimos una intervención internacional, preferiblemente avalada por las Naciones Unidas, que desaloje a esos tiranos del poder y convoque de inmediato a unas elecciones libres,» afirmó Uribe en un acto político, donde también criticó las acciones del chavismo.
La propuesta fue respaldada por el también exmandatario colombiano Iván Duque, quien, a través de su cuenta en X, instó al líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia a convocar a la comunidad internacional para adelantar una intervención humanitaria en el país. Según Duque, esta medida es necesaria para proteger los derechos humanos y restaurar el orden democrático en Venezuela.
Por su parte, la líder opositora María Corina Machado elogió la resistencia del pueblo venezolano frente al régimen chavista, calificándolo de «criminal» y asegurando que la lucha por la libertad prevalecerá.
«El pueblo venezolano ha desafiado el miedo y la brutal represión, manteniéndose unido y firme frente a un régimen desesperado por aferrarse al poder para evadir la justicia,» expresó Machado.
Asimismo, Machado se mostró optimista sobre el futuro bajo el liderazgo de González Urrutia, quien se autoproclama ganador de las elecciones de julio pasado y asegura que tomará posesión en el momento oportuno.
La juramentación de Nicolás Maduro por parte de la Asamblea Nacional, controlada por el chavismo, se dio en medio de cuestionamientos de la oposición y del desconocimiento de gran parte de la comunidad internacional. Líderes como González Urrutia sostienen que los comicios fueron fraudulentos y que él es el presidente legítimo electo.
Mientras tanto, Maduro reiteró su llamado a la reconciliación y prometió que su gobierno garantizará paz y estabilidad en Venezuela, aunque sus críticos insisten en que las acciones del chavismo solo perpetúan la crisis económica y social que afecta al país.