Los incendios forestales que azotan el área de Los Ángeles, California, han cobrado la vida de al menos 16 personas y devastado más de 15.000 hectáreas desde su inicio a principios de esta semana.
El incendio Eaton, localizado al noreste, cerca de Pasadena y Altadena, ha sido particularmente letal, con 11 víctimas mortales confirmadas. Por su parte, el incendio Palisades, que ha consumido cerca de 9.572 hectáreas y está contenido en solo un 11%, ha causado cinco fallecimientos adicionales.
Las autoridades han emitido órdenes de evacuación que afectan a más de 153.000 residentes, mientras cientos de bomberos continúan combatiendo las llamas en condiciones adversas, anticipando un incremento de los vientos que podría complicar aún más las labores de extinción.
Además de la pérdida de vidas humanas, los incendios han destruido aproximadamente 12.000 estructuras, incluyendo viviendas y vehículos, dejando a numerosas familias sin hogar.
El gobernador de California, Gavin Newsom, ha agradecido el apoyo internacional, destacando la llegada de 72 bomberos y personal de emergencia desde México para colaborar en la respuesta a los incendios.
La causa de los incendios sigue bajo investigación, y las autoridades instan a la población a mantenerse alerta y seguir las indicaciones de evacuación y seguridad emitidas por los servicios de emergencia.