La Lotería de Medellín se encuentra en el ojo del huracán tras conocerse que la esposa de un subgerente comercial de la entidad ganó un premio de 1.000 millones de pesos en un sorteo especial. La Procuraduría General de la Nación abrió una investigación disciplinaria para esclarecer posibles irregularidades en el sorteo realizado el pasado 9 de mayo, con motivaciones del Día de la Madre.
Según fuentes oficiales, el exsubgerente Rubén Darío Callejas Gómez adquirió legalmente un billete para regalar a su esposa y este resultó ganador de uno de los dos premios secos de 1.000 millones. El caso generó tensión institucional, lo que llevó a activar una auditoría interna y una investigación forense, cuyos primeros resultados no detectaron anomalías y calificaron el proceso como “con altos estándares de calidad”.
Confrontado por los controles internos, Callejas presentó su renuncia irrevocable el 26 de mayo. El exfuncionario aseguró que se sintió irrespetado al no ser informado con antelación sobre la auditoría forense y resaltó que los controles concluyeron que «no se observan desviaciones» en el sorteo.
La Procuraduría, por su parte, informó que abrió la indagación previa luego de recibir denuncias mediáticas y mensajes del presidente Gustavo Petro, quien cuestionó la transparencia del proceso y exigió claridad a los órganos disciplinarios. Cabe señalar que parte de la confusión se originó en la información sobre el número del sorteo (4782 y 4788), hechos que el organismo busca aclarar.
Este nuevo episodio pone a prueba los protocolos de transparencia y la confianza ciudadana en los juegos de azar gestionados por entidades públicas. Aunque la Lotería de Medellín asegura haber actuado conforme a la ley, las investigaciones de la Procuraduría definirán si se confirmaron los procedimientos o si existió algún favorecimiento indebido.

