Familiares y amigos dieron el último adiós a Carlos Gurrola, conocido como “Papayita”, quien murió tras permanecer 19 días hospitalizado luego de ingerir por accidente una sustancia tóxica en su lugar de trabajo en Torreón, Coahuila.
Según la versión de sus allegados, una broma pesada fue lo que terminó con su vida. Gurrola, de 47 años, trabajaba como personal de limpieza en un supermercado donde, de acuerdo con su familia, sufría de bullying constante. Presuntamente, un compañero habría vertido desengrasante en la bebida que él consumió tras su jornada de almuerzo.
El líquido le provocó quemaduras internas y complicaciones graves en garganta y vías respiratorias, lo que lo llevó a ser internado en el Instituto Mexicano del Seguro Social. Pese a los esfuerzos médicos, falleció el 18 de septiembre, dejando en duelo a su entorno familiar y laboral.
La familia aseguró que Gurrola era víctima de hostigamiento reiterado, que incluía burlas, amenazas y daños a sus pertenencias. Estos antecedentes han reforzado la exigencia de que se investigue a fondo lo ocurrido y se determine si existió responsabilidad directa de sus compañeros.
La Fiscalía General del Estado de Coahuila abrió una carpeta de investigación para esclarecer los hechos. Entre las diligencias se encuentran entrevistas a testigos y la búsqueda de videograbaciones que permitan confirmar cómo llegó el químico a la bebida.
El caso ha generado indignación nacional, reactivando el debate sobre el bullying laboral y la vulnerabilidad de los trabajadores subcontratados. En redes sociales, miles de usuarios se han sumado a la exigencia de justicia y a un llamado para erradicar las prácticas de acoso en los entornos de trabajo.
