El gobierno de Venezuela, liderado por el presidente Nicolás Maduro, ha ordenado el cierre temporal de las fronteras con Colombia en los estados de Norte de Santander y Arauca. Esta medida coincide con el inicio de los ejercicios militares «Escudo Bolivariano 2025», que buscan fortalecer la seguridad en las zonas limítrofes.
El presidente Maduro ha desplegado aproximadamente 150,000 efectivos en estas maniobras, enfatizando la necesidad de garantizar la paz y la soberanía del país ante posibles amenazas externas. Vestido con uniforme militar y acompañado por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, Maduro declaró que estos ejercicios son una demostración del poderío armado de Venezuela.
La región del Catatumbo ha sido escenario reciente de enfrentamientos entre grupos armados ilegales, lo que ha generado preocupación en ambos lados de la frontera. El presidente colombiano, Gustavo Petro, ha reconocido la gravedad de la situación, señalando que podría ser «uno de los hechos más dramáticos de la historia contemporánea». Petro ha declarado el estado de excepción y ha enviado más de 600 efectivos militares para intentar controlar la violencia en la zona.
La decisión de Venezuela de cerrar las fronteras y realizar ejercicios militares en áreas sensibles como el Catatumbo ha generado tensiones diplomáticas con Colombia. Analistas advierten que estas acciones podrían complicar aún más la ya delicada situación de seguridad en la región.