El Pacto Histórico consolidó sus precandidatos para la consulta interna del próximo 26 de octubre, revelando seis nombres que competirán por ser la representación oficial del partido del actual Gobierno en las elecciones presidenciales de 2026, según lo confirmado durante la Convención Nacional del 19 de julio en Bogotá por Gustavo Bolívar.
Los candidatos inscritos hasta ahora son:
- Carolina Corcho, médica y exministra de Salud, conocida por liderar reformas sanitarias y centrarse en políticas públicas de bienestar.
- Susana Muhamad, politóloga y exministra de Ambiente, defensora de la sostenibilidad ambiental y la paridad de género, presente en la convención desde el inicio.
- Gloria Flórez, socióloga y senadora, activa en Colombia Humana, quien resaltó la importancia de la unidad interna.
- Camilo Romero, exembajador en Argentina, exgobernador de Nariño y periodista de formación, conocido por su rol internacional y enfoque en descentralización.
- Daniel Quintero, exalcalde de Medellín e ingeniero electrónico, debe sortear la incertidumbre legal que rodea su candidatura.
- Gustavo Bolívar, exdirector del DPS y escritor, ampliamente posicionado en encuestas y con apoyo significativo, aunque sin el respaldo total de Petro.
La omisión de María José Pizarro, senadora y activista de memoria histórica, generó revuelo. A pesar de haber manifestado públicamente su intención de participar y ofrecer una gira nacional, no fue mencionada en la lista inicial; sin embargo, aún podría formalizar su inscripción antes del cierre previsto en septiembre.
La consulta del 26 de octubre seleccionará al aspirante que representará al Pacto Histórico en marzo de 2026 dentro del Frente Amplio, una segunda vuelta que integrará a otros sectores de izquierda y centro afines al proyecto, al tiempo con la renovación del Congreso.
La estructura democrática que ha definido el Pacto contempla requisitos como aval institucional o 50 firmas de dirigentes, respaldo del 80 % del comité nacional y obligaciones de transparencia. Además, sigue en curso una campaña de afiliación con el objetivo de superar los 500.000 militantes antes del 9 de septiembre, fecha límite para registrar las candidaturas ante la Registraduría.
Esta etapa marca un hito en la estrategia electoral del Pacto Histórico: un proceso interno amplio, competitivo y estructurado, con aspirantes variados que representan tanto continuidad como renovación del proyecto político de cara a 2026.