Un nuevo impulso llega al campo de Medellín con una inversión de 500 mil dólares provenientes de la cooperación internacional, destinados a fortalecer la innovación tecnológica en los corregimientos. El proyecto, desarrollado por la Alcaldía de Medellín en alianza con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), busca modernizar el sistema agroalimentario distrital y promover un modelo productivo sostenible con enfoque tecnológico.
El financiamiento proviene del Ministerio de Agricultura de Alemania y será ejecutado directamente por la FAO. Los recursos permitirán beneficiar a 70 parcelas rurales con tecnología de precisión y formar a 20 jóvenes como agrogestores digitales, quienes acompañarán la implementación de procesos de agricultura inteligente. “Con estos recursos llevaremos tecnología, formación y acompañamiento a nuestros productores rurales, para que produzcan mejor, tengan menos desperdicios y más oportunidades sin tener que dejar su tierra”, explicó el gerente de Corregimientos, Andrés Felipe López Vergara.
Durante el primer semestre del año se completó la fase técnica y operativa del programa, desarrollada con el apoyo de la Agencia de Cooperación e Inversión de Medellín (ACI Medellín), el Instituto Tecnológico Metropolitano (ITM) y la Gerencia de Corregimientos. En esta etapa se estructuró el modelo Smart Farming, que se aplicará inicialmente en los corregimientos de San Cristóbal y Palmitas, beneficiando a 20 productores —15 en San Cristóbal y cinco en Palmitas— con 20 parcelas demostrativas y 50 parcelas réplica, donde se transferirá conocimiento y tecnología para mejorar la productividad rural.
El convenio, con una duración de 36 meses, contempla acciones enfocadas en cuatro ejes estratégicos: reducción de pérdidas y desperdicios de alimentos, fomento de la innovación tecnológica y la bioeconomía, fortalecimiento de la gestión del conocimiento y medición del impacto directo en las comunidades rurales de Medellín. Con esta iniciativa, la ciudad avanza hacia un modelo agrícola más eficiente, competitivo y sostenible, que integra la tecnología como motor del desarrollo territorial y la seguridad alimentaria.














