En un sorprendente giro, el magnate tecnológico Elon Musk emitió hoy una disculpa pública al expresidente Donald Trump, admitiendo que sus recientes críticas “fueron demasiado lejos”. Trump respondió agradeciendo el gesto y descartando represalias contra sus empresas, como Tesla y SpaceX, lo que parece indicar una posible reconciliación tras un enfrentamiento de gran repercusión.
En un mensaje en X (antes Twitter), Musk escribió:
“Lamento algunas de mis publicaciones sobre el presidente @realDonaldTrump la pasada semana. Fueron demasiado lejos.”
La disculpa fue secundaria a una serie de afirmaciones incendiarias, entre ellas críticas al proyecto fiscal de Trump y acusaciones sobre supuestos vínculos con Jeffrey Epstein. Varios de estos mensajes han sido eliminados desde entonces.
La Casa Blanca confirmó que Trump recibió la disculpa con beneplácito y no planea cancelar contratos o subsidios autorizados a las compañías de Musk. Según la portavoz Karoline Leavitt, el presidente “agradece la declaración de Musk esta mañana” y subrayó que no se tomarán medidas punitivas.
La disputa entre Musk y Trump comenzó tras la renuncia del magnate como asesor en el Departamento de Eficiencia Gubernamental, luego de manifestar que el plan fiscal de Trump era una “abominación”. Musk también criticó las nuevas tarifas y presionó por el juicio político al expresidente, antes de insinuar vínculos con Epstein, un alegato que posteriormente borró.
Trump, a su vez, respondió acusándolo de “volverse loco” y advirtió sobre posibles represalias en contratos estatales, lo que generó preocupación en Wall Street y provocó una caída en las acciones de Tesla y SpaceX.
El llamado público a la calma propiciado por Musk, sumado al gesto conciliador de Trump, implica una salida estratégica a un enfrentamiento que puso en riesgo proyectos empresariales e iniciativas políticas de ambos. El sector empresarial y los inversores acogen con alivio esta tregua, aunque aún existe un grado de desconfianza entre las partes.