La Fundación Santa Fe de Bogotá emitió desde tempranas horas del martes 24 de junio un nuevo parte médico referente a la evolución del senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay, quien fue sometido a una intervención quirúrgica durante el reciente fin de semana. El informe, publicado como Comunicado a la Opinión Pública No. 013, confirma que el político continúa en la Unidad de Cuidados Intensivos bajo manejo médico especializado, y se informa una desescalada en su estado crítico, al transitar a una fase subaguda tras superar los 16 días de evolución del atentado que sufrió el 7 de junio en un parque de Bogotá.
En los últimos tres días, el equipo médico le practicó procedimientos clave como traqueostomía y gastrostomía, considerados imprescindibles para estabilizar su condición y reducir la criticidad de su estado, según el texto divulgado por la clínica luego de la solicitud expresa de su familia. A pesar de la leve mejora, se mantiene la gravedad del caso y un pronóstico neurológico reservado, con monitoreo permanente de signos vitales dentro de un abordaje multidisciplinario.
El atentado contra Uribe Turbay fue perpetrado por un joven de 14 años durante una actividad política en Fontibón, que le causó múltiples heridas, incluyendo impactos en el cráneo y una pierna, además de un sangrado intracerebral que requirió múltiples cirugías previas por traumatismo y edema. Desde entonces ha permanecido en la Fundación Santa Fe, centro asistencial reconocido por su capacidad en neurocirugía y manejo crítico.
Este nuevo parte médico representa un avance en la contención de su condición, evidenciado en la transición de fase y en las medidas quirúrgicas realizadas. No obstante, los médicos han sido claros en resaltar que el camino hacia su recuperación dependerá de la evolución neurológica en los próximos días, sin que se puedan anticipar resultados concretos.
El atentado ha generado una respuesta social amplia, con marchas de silencio y cadenas de oración en apoyo al senador, así como un llamado nacional a reforzar los mecanismos de seguridad para candidatos políticos. El proceso judicial continúa, con un menor capturado que no aceptó los cargos, y la Fiscalía investiga posibles vínculos con redes criminales.