Durante el acto público de reconocimiento de responsabilidad internacional del Estado colombiano ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, un ciudadano interrumpió el discurso del presidente Gustavo Petro con un grito que estremeció el evento: “¡Deje de burlarse de nosotros!”.
El mandatario, sorprendido y visiblemente incómodo, guardó silencio unos segundos y luego respondió: “Ay, Dios… Este será el hecho por el cual se recuerde este evento. Yo hablo con mi corazón, no con la mentira”.
El episodio ocurrió mientras Petro reflexionaba sobre la violencia en Colombia y la situación de Palestina, comentarios que generaron incomodidad entre algunos asistentes.
Tras el tenso momento, el presidente retomó su intervención afirmando: “Podemos volver al tema del genocidio de Palestina y de Colombia, así disguste”.
El evento tenía como fin reconocer la responsabilidad del Estado en las violaciones de derechos humanos cometidas contra los miembros del Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo (CAJAR) y de Pedro Julio Mahecha Ávila.
El grito y la reacción presidencial se viralizaron rápidamente en redes sociales, convirtiendo lo que debía ser un acto solemne en un episodio de tensión política y emocional.
