El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, y el gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, lideraron un encuentro estratégico con los mandatarios del área metropolitana para abordar la compleja situación de orden público que atraviesa la región. Durante la jornada, Gutiérrez emitió duras críticas hacia la política de «Paz Total» del Gobierno Nacional, asegurando que a ocho meses de finalizar el actual mandato presidencial, los únicos beneficiados han sido las estructuras criminales. El alcalde señaló que organizaciones como el ELN, las disidencias de las FARC y el Clan del Golfo se han fortalecido, citando como prueba reciente el atentado terrorista registrado en el peaje de Barbosa y Girardota.
En su intervención, el mandatario local denunció con vehemencia la liberación de alias «Mono Clinton», exjefe del bloque urbano del ELN capturado en 2019, quien purgaba una condena de 40 años de prisión. Gutiérrez calificó como un «desastre» en materia de seguridad que este criminal haya quedado en libertad hace pocos meses bajo la figura de gestor de paz. Según el análisis presentado, estas decisiones han abierto espacios para que grupos como el Frente 36 de las disidencias retomen su accionar terrorista, incluyendo ataques contra la infraestructura eléctrica, lo que evidencia, según sus palabras, un retroceso en los logros operativos de años anteriores.
La crisis de seguridad también se trasladó a los entornos educativos, donde el alcalde reportó una grave situación en el Politécnico Jaime Isaza Cadavid. Gutiérrez aclaró que el reciente incendio en la institución no fue accidental, sino un acto premeditado por cerca de diez encapuchados que ingresaron a una oficina para prenderle fuego. Ante estos hechos, hizo un llamado a no confundir la autonomía universitaria con permisividad frente al delito, exigiendo el ingreso inmediato de la Policía y la Fiscalía para recolectar pruebas y judicializar a la minoría violenta que afecta a la comunidad estudiantil.
Finalmente, ambos líderes regionales reiteraron su respaldo irrestricto a la fuerza pública, solicitando intensificar las labores de inteligencia y la ejecución de allanamientos para prevenir nuevos ataques terroristas en el Valle de Aburrá. A pesar de pronosticar meses complejos por la falta de garantías del Gobierno Nacional, Gutiérrez instó a la ciudadanía y a las instituciones a mantener la firmeza y la resistencia, expresando la necesidad de superar lo que denominó una «horrible noche» para recuperar la tranquilidad y la seguridad en el departamento.
