La cadena de restaurantes Frisby España, con sede en Bilbao, anunció la suspensión temporal de su programa de franquicias en el país ibérico. La decisión se produce en medio de una disputa legal con la empresa colombiana Frisby S.A. BIC, que acusa a la firma española de utilizar su marca sin autorización.
En un comunicado oficial, Frisby España explicó que la medida busca «proteger a nuestros futuros franquiciados, así como preservar la integridad y la reputación de la marca en el territorio español, mientras avanzamos en la clarificación de la situación».
La controversia comenzó cuando Frisby Colombia detectó que una empresa en España estaba utilizando su nombre, logotipo y personaje icónico en redes sociales y sitios web, generando confusión sobre una posible expansión de la marca al mercado europeo. La compañía colombiana aclaró que no tiene operaciones ni ha autorizado el uso de su marca en España, y anunció acciones legales para proteger su propiedad intelectual.
Por su parte, Frisby España sostiene que es el titular legal de la marca en la Unión Europea, argumentando que la empresa colombiana no ha hecho uso efectivo de la misma en el continente desde su registro en 2005. La firma española afirma que su operación es legítima y conforme a la normativa europea, y que continuará con su expansión en Europa de manera unilateral si no se alcanza un acuerdo con la matriz colombiana.
El caso ha generado una ola de apoyo en Colombia hacia la marca original, con campañas en redes sociales bajo el lema «nos damos aPollo», y ha puesto de relieve la importancia de proteger adecuadamente las marcas en mercados internacionales para evitar conflictos legales.
Mientras tanto, la disputa continúa en los tribunales, y el futuro de la marca Frisby en Europa permanece incierto.
