Por: Hernán Maldonado
Tres poderosos destructores de Estados Unidos se encuentran hoy cerca al mar territorial venezolano y, si uno se deja llevar por los optimistas, este domingo debió empezar la operación bélica para sacar de su madriguera al dictador Nicolás Maduro Moros.
En Venezuela hay un dicho popular: “Deseos no preñan”, aplicable a lo que ocurre en la patria de Simón Bolívar, desde que el presidente Donald Trump dispuso el uso de la fuerza militar para luchar contra el narcotráfico.
Al completarse hoy el cerco marítimo y aéreo, en muchos medios regionales se especulaba que empezaría la caza de Maduro, por el que EE.UU. ofrece $us 50 millones, algo que jamás pagó por enemigo alguno.
El viernes, cuando la Casa Blanca anunció que Trump le hablaría al país, los medios generaron una colosal expectativa. Hubo un canal venezolano que desde el exilio proclamaba irresponsablemente que el presidente anunciaría las operaciones militares en Venezuela.
“Falta media hora, 20, minutos, 10, 5, 4… minutos, decía el microfonero…”
Apareció Trump rodeado de los jerarcas de la FIFA para anunciar… que el sorteo de la próxima Copa Mundial se realizará a fin de año en el Centro Kennedy…
¿Verdaderamente tropas de EE.UU. invadirán Venezuela para sacar a Maduro?
Tengo mis dudas.
La valiente líder venezolana María Corina Machado ha dicho que serán los propios venezolanos que sacarán al dictador. Quiere decir que una rebelión interna dentro de las propias fuerzas de Maduro sería el brazo operativo. Significaría que el despliegue militar de EE.UU. alentaría a que eso ocurra, sembrando, primero miedo, en la cúpula madurista.
Con el cerco marítimo y aéreo, lo que Trump se propone es evitar que el Cártel de los Soles, siga inundando de drogas ilícitas el mundo, como su principal fuente de financiamiento, asociado a cárteles colombianos y mexicanos. Esa colosal fuente de ingresos le permite a Maduro financiar su dictadura.
En síntesis. Deben ser los propios venezolanos que depongan a su narco régimen. Lo de EE.UU. sería impedir prosiga el tráfico de drogas, lo que significa que el cerco podría ser de larga data, a menos que…
A menos que a Maduro y sus generalotes se les ocurra una estupidez contra la flota norteamericana u ocurra una excusa como la del Golfo de Tonkin, manipulada para que el imperio entrara en la guerra de Vietnam.
Muchos creen que ocurrirá lo de Panamá, cuando tropas de EE.UU. derrocaron al dictador Manuel Antonio Noriega, lo capturaron y fue juzgado y encarcelado por años en EE.UU.
Pierden de vista que en esa invasión participaron alrededor de 30.000 soldados, que EE.UU. tenía tropas en el Canal y que ese pequeño país jamás puede compararse con Venezuela, territorial y militarmente.
¡Claro! Han pasado muchos años y la tecnología avanzó un mundo. Recuerden que en enero del 2020 comandos de EE.UU. liquidaron al mayor general iraní Qasem Suleimani con un dron, cuando su vehículo salía del aeropuerto de Teherán.
El ataque fue milimétrico, tan preciso, que no sufrieron daños los escoltas que ocupaban los autos delante y detrás del suyo.
Si la intimidación va en aumento, podría esperarse de un bombardeo a las instalaciones, campamentos y aeropuertos en la zona fronteriza colombo-venezolana donde operan desde hace años impunemente los narcotraficantes del EBL venezolano y los colombianos de las FARC, el ELN y la Segunda Marquetalia.
En todo caso, según pienso, no habrá invasión. La movilización de solo 4.500 hombres lo indica así. Quizás (y lo dudo) una operación de “pisa y corre”, es decir una operación comando de entrada y salida rápida a y desde Venezuela…
Amanecerá y veremos.