En un contexto de creciente tensión regional, el exalcalde de Caracas Antonio Ledezma advirtió este lunes que Estados Unidos no desplegó hasta tres buques de guerra en el Caribe con el propósito de «ver delfines». En una entrevista para la emisora Blu Radio, Ledezma calificó la insinuación de intervención militar como infundada y sostuvo que dicha maniobra constituye un mecanismo de presión sobre “una corporación criminal que viene cometiendo un sinnúmero de delitos”.
La movilización de estas unidades navales sucede en un escenario político altamente volátil. EE.UU. ordenó el despliegue del USS Gravely, USS Jason Dunham y USS Sampson, buques dotados del sistema de combate Aegis, junto con 4.000 marines y aeronaves de apoyo, con el objetivo declarado de combatir actividades vinculadas al narcotráfico.
Desde el gobierno venezolano, la reacción fue inmediata. El presidente Nicolás Maduro calificó el despliegue de los buques como un acto «inmoral, criminal e ilegal», y anunció la movilización de más de 4,5 millones de venezolanos para integrar milicias populares como respuesta a lo que considera una amenaza imperialista.
Por su parte, fuentes estadounidenses describen la presencia naval como parte de una ofensiva contra el narcotráfico, que incluye la designación del Cartel de los Soles —asociado con el gobierno de Maduro— como organización terrorista, una recompensa de 50 millones de dólares por su captura, y el despliegue de capacidades militares significativas en la región.
Ledezma defendió que este tipo de despliegue no responde a un espectáculo diplomático, sino a una escalada con fines coercitivos. Además, cuestionó la arcada de libertades que Maduro intenta proyectar tras la liberación de opositores, sugiriendo que se trata de un “doble juego” para generar una falsa apertura.