Por: Federico Senior
Tenemos los colombianos, la fea costumbre de magnificar lo que somos, lo que es nuestro país, lo que son nuestros logros, nuestra cultura, creemos aún que nuestro himno es el segundo mas bonito del mundo, que nuestras esmeraldas son las más preciadas, que Cartagena es la ciudad más bella de la Tierra, que el Aeropuerto Eldorado es el mejor de Suramérica y larga la lista.
Nada de eso es cierto, hubo algo que sucedió en el día de ayer (23 de agosto) en el Aeropuerto de Bogotá, que cuestiona mucho ese pretendido galardón de ser el mejor, abordo estaba un vuelo destino Cartagena, ya cerrada la puerta del avión, aparece un señor (extranjero y turista, supimos después), como un loco, pateando la puerta del avión, golpeando las ventanillas, las paredes del túnel, gritaba desaforado, el asunto es que, seguridad o la policía, se demoró mas de cinco minutos en llegar, atacante había llegado saltándose todas las barreras, las de seguridad, las de la aerolínea, aun así, tuvo todo el tiempo del mundo para realizar su acto vandálico, sin que nadie, ningún funcionario o autoridad del “mejor aeropuerto de Suramérica” llegara al sitio a poner orden.
Informan después que el señor fue detenido y deportado, bien, pero la cuestión es, ¿Cómo es posible que en un aeropuerto del tamaño de Eldorado, no haya personal de seguridad para atender un caso como este, de manera inmediata como hubiera sucedido en cualquier otro aeropuerto del mundo?, nos queda a los usuarios, la sensación de que en el aeropuerto capitalino, puede suceder cualquier cosa, puede subir al avión, un terrorista cualquiera con bombas, armas o sabrá Mirluz que cosa, no es un sitio seguro el aeropuerto, ni seguro, ni bonito, ni eficaz, ni de alta calidad (por ejemplo, los baños son ridículamente pequeños, insuficientes retretes, no hay agua caliente en los lavamanos), en fin, lamentable que se sucedan estos hechos, terribles por demás.
Que nos sirva de lección, para entender que no tenemos un país maravilloso, que no es el nuestro el más bello del mundo, que el turismo que tenemos, es porque la oferta de prostitución (de todo tipo, infantil, homosexual, sadismo, etc), es más abundante y barata que en todo el mundo, incluida Bangkok, otrora considerada la ciudad del pecado, título que hoy disputan palmo a palmo, Medellín y Cartagena, sumado esto, la sencilla manera como se consiguen las drogas, con la anuencia y complicidad de las autoridades policiales, completando así, la combinación letal conque proxenetas y micro traficantes, se han vuelto los reyes del Parque Lleras en Medellín, o de la Puerta del Reloj, y la San Martín de Cartagena, sin que nadie los toque.
Ni tenemos tampoco las mas bellas playas, son escasas las que lo son, Coveñas, algunas del sector de Santa Marta, y San Andrés, de resto las nuestras, no son playas atractivas para el turismo de alto nivel, que visita Cancún, Punta Cana, Aruba, Seychelles, Bora Bora, las nuestras son playas feas, hay que reconocerlo.
De igual manera, no existe en nuestro país ningún atractivo arqueológico, se medio salva la ciudad perdida de la Sierra Nevada de Santa Marta, y se salva del todo San Agustín en el Huila, pero hasta ahí, no hay nada más que mostrar.
Ni hablemos de la seguridad, vivimos hoy el recrudecimiento de la violencia, bombas, bloqueos, secuestros, extorsión, atracos, no hay lugar en Colombia, en donde la gente pueda sentirse segura, ya eso determina, que no es el nuestro un buen sitio, ni para vivir, ni para visitar y hoy en día, ni para invertir.
Nuestras ciudades, no son lo mejor, son feas, sucias, inseguras, de gentes mal educadas, solo si miramos el comportamiento de los conductores en las vías, en todas las ciudades, todo el mundo hace lo que le da la gana, parquean donde quieren, se vuelan los semáforos, andan lento por el carril izquierdo, son un desastre.
Colombianos, se que no les gusta lo que escribo, está bien, aplaudo su amor patrio, pero es que no podemos cegarnos a las realidades, para tener un país hermoso, viable, tranquilo, tenemos que comenzar por nosotros mismos, por hacer la fila, respetar las señales de tránsito, no armar ruidosas fiestas en el apartamento, no arrojar basura en las calles, no parquear en la entrada del vecino, recoger lo del paseo de los perritos, para tener un país hermoso y de mostrar, tenemos que hacernos dignos de él, tenemos, repito, que comenzar por nosotros mismos.
Coletilla: Ni nuestro himno es el segundo, ni nuestro aeropuerto es el primero, las que se salvan, eso sí, son nuestras mujeres, que sin duda alguna, SON LAS MAS BELLAS DEL PLANETA TIERRA…..
