Por: William Calderón Z.
Las premoniciones de Simón Bolívar
En el Manifiesto de Cartagena, escrito por El Libertador en diciembre de 1812, siendo apenas coronel del ejército y bordeando los 29 años de edad, Bolívar señaló las causas de la caída de la primera República de Venezuela, así: “Los códigos que consultaban nuestros magistrados, no eran los que podrían enseñarles la ciencia práctica del gobierno, sino los que han formado ciertos buenos visionarios que, imaginándose repúblicas aéreas, han procurado alcanzar la perfección política, presuponiendo la perfectibilidad del linaje humano… tuvimos filósofos por jefes, filantropía por legislación, dialéctica por táctica y sofistas por soldados”.
Más adelante, sentencia nuestro futuro en tan concienzudo documento: “A cada conspiración sucedía un perdón y a cada perdón sucedía otra conspiración que se volvía a perdonar.”
La historia vuelve a repetirse…
En la actualidad, todos los problemas del país, después de un accionar delictivo, se llevan las famosas mesas de negociación y no ante un juez de la república y al uso de la fuerza persuasiva del estado…Se viola y usurpa la propiedad privada, se impide la libre circulación por las vías nacionales, los filósofos comunistas que nos gobiernan se ponen del lado de secuestradores, extorsionistas, asesinos de policías y por supuesto, de toda la guerrillerada, como diría Tirofijo en otros tiempos. La fuerza pública está maniatada, mal vestida, mal comida y expuesta a la humillación que el ministro Velásquez llama “cerco humanitario”, pidiéndoles a nuestros soldados y policías que “no den papaya”. Los ciudadanos estamos desprotegidos, a acorralados y miles obligados a pagar vacunas para sostener sus cultivos y proteger sus vidas… Están haciendo arreglos superfluos y sin soporte legal, ya que los proyectos de ley de sometimiento serán llevados al legislativo solo después de las elecciones regionales del 29 de octubre del presente año. Rueda, comisionado de paz, ha hablado con catorce bandas de Medellín, dos de Buenaventura y tres de Quibdó. Por otro lado, el Estado colombiano ha perdido poco a poco, con el embeleco del cese al fuego, buena parte del territorio nacional, ahora dominado de la siguiente manera: el Clan del Golfo hace presencia en 24 departamentos y en 392 municipios. El ELN lo hace en 19 departamentos y en 224 municipios. Las disidencias de las FARC de Iván Mordisco, en 18 departamentos y en 180 municipios, mientras que la Nueva Marquetalia está instalada en 14 departamentos y 69 municipios. Es una realidad triste que no conmueve al gobierno, pues lo que ellos desean no es la paz total, sino la impunidad total y la miliciación de la patria, mientras las Fuerzas Armadas y la policía inermes, dejan de cumplir con sus tareas porque así lo ordenan las mentes discordantes que hoy ejercen el mando.
Chuspas resultó ‘un paquete’
Luis Fernando Velasco, a quien en Popayán conocen como “Chuspas”, resultó paquetazo que, en vez de recomponer la malhadada mayoría del gobierno en el Congreso de la República, lo que ha hecho es agrandar la grieta en su proceder con los partidos políticos; ahora el enfrentamiento es con los gobernadores que reclaman porque se sienten arrinconados con la situación del orden público que es el peor en 20 años. Velasco Chávez les llama hipócritas. Se le olvida a tan ilustre patojo que esta materia está constitucionalmente a cargo del gobierno central.
Houdini Petro, el mago que aparece y desaparece
Son 85 las veces que el Presidente de la República ha dejado plantados a empresarios, magistrados, fuerzas militares, alcaldes, gobernadores, colectivos sociales, ciudadanos del común y presidentes de otras naciones.
Solo se aparece en eventos como el de Pitalito para amenazar a la Federación Nacional de Cafeteros, indicar que no se dará la revisión del TLC con Estados Unidos, sino una renegociación del tratado, notificando sus delirios vía micrófono y plaza pública, ignorando los mecanismos institucionales y legales.
Gustavo Petro ya acabó con buena parte de la confianza inversionista cuando, por un acto irresponsable y populista, no cumplió con los contratos de concesión de las vías, impidiendo el aumento de los peajes, lo que ha abierto un hueco fiscal de un billón de pesos que acabaremos pagando todos. Estamos, no viviendo sabroso, sino en la época de la desaceleración económica, con un crecimiento pírrico de un 0.3% en el trimestre anterior, registrándose cifras negativas en exportaciones, comercio, industria, vivienda, sector minero energético y muchos más.
Estamos como el cangrejo
Volvimos a los 90 con el establecimiento de los mataderos municipales que deja por fuera la inocuidad de la carne, ya que adoptar el sistema de prevención y control internacional HACCP, no será obligatorio sino voluntario, exponiendo a la población a la zoonosis, infecciones parasitarias, bacterias en la sangre y en consecuencia bloquear las exportaciones de carne de ganado colombiano.
Gustavo Petro, como bien lo dijo Ingrid Betancourt, vino a destruir todo, la salud, el régimen pensional, el crecimiento de la construcción. Su palabrería, ya más que fastidio y rabia, produce pánico económico y social, haciendo que el riesgo país aumente día a día.
A examen médico ejecutivo
Juan Espinel y Cristian Garcés han radicado en el Senado de la República, una solicitud para que el primer mandatario sea sometido a un riguroso examen médico por parte de la Academia Colombiana de Medicina y/o por la Federación Médica Colombiana.
Deberán estudiar y emitir un diagnóstico sobre su estado mental, físico y emocional. Algunos hablan de ciclotimia, otros de trastorno bipolar, de psicopatía, de megalomanía y de adicción a sustancias psicoactivas. Lo anterior en cuanto a su salud mental. Los dimes y diretes de la salud física del Presidente también podrán precisarse y se trata de una prioridad.
Efraín Cepeda se puso serio
Por fin habló de manera enfática en el Congreso el Fincho Cepeda, Presidente del Partido Conservador, cuando conminó en la Comisión Tercera del Senado a los ministros que, por la baja ejecución presupuestal de sus carteras, flaco favor le están prestando al país, lanzándoles la advertencia de que a falta de una ejecución satisfactoria, habrá que reordenar el destino de sus presupuestos. Ya era hora de que el Fincho, después de 31 años en el Senado, hablara claro y se pusiera serio.
Me gusta esto:Me gusta Cargando…
Relacionado
