En un video publicado recientemente, la concejal de Medellín Claudia Carrasquilla ha hecho pública una denuncia que sacude el panorama político local. Según su relato, el alcalde Federico Gutiérrez, el secretario de Seguridad Manuel Villa, los concejales Andrés Tobón y ella misma han sido objeto de amenazas por parte de los frentes 18 y 36 de las disidencias de las FARC, en alianza con la Oficina de Envigado, dirigido por alias ‘Douglas’ y alias ‘Pesebre’. Estas estructuras criminales ofrecerían hasta 8 millones de dólares por atentar contra cualquiera de ellos. La fuente de esta información es una comunicación que habría recibido la Fiscalía General de la Nación desde la cárcel de Cómbita, considerada de alta credibilidad.
La concejal enfatizó que no se trata únicamente de una amenaza aislada. También denunció que una alianza entre la Oficina del Doce y la Oficina de Córdoba (o el GDO de Córdoba) estaría recaudando dinero con el fin de perpetrar un atentado con artefacto explosivo contra el secretario de Seguridad, mientras que los concejales estarían en la mira mediante ataques armados durante sus recorridos comunitarios.
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Carrasquilla subrayó que dichos atentados se originan en la firme oposición que han mostrado —junto con sus colegas— frente a las llamadas “mesas de paz urbana”, y en su compromiso público con la verdad frente al crimen organizado. “Lo único que hemos hecho… es luchar contra el crimen organizado”, declaró, destacando que no retrocederán ni serán silenciados.
La gravedad de la situación se agrava al señalar que la lista de posibles objetivos incluye también a precandidatos presidenciales y al expresidente Álvaro Uribe, lo que pone en evidencia un posible impacto nacional de esta escalada criminal. Además, este escenario se torna aún más delicado tras la muerte reciente de Miguel Uribe —presuntamente víctima de un atentado atribuido a disidencias de las FARC—, y tras el anuncio, por parte del gobierno nacional, del abatimiento del “zarco” al Dinever, señalado como el cerebro de dicho ataque.
Ante este contexto, las bancadas de Creemos, Centro Democrático y ASI emitieron un comunicado conjunto para visibilizar esta amenaza de forma institucional y hacer frente a lo que consideran una agresión directa a la democracia. La concejal Carrasquilla recalcó el derecho a expresarse y actuar sin intimidaciones: “No nos van a callar. No nos van a intimidar. Vamos a seguir enfrentando a los violentos. Medellín no se rinde.”
