La madrugada del lunes, el AC Milan hizo oficial el fichaje de Luka Modric, quien firma por una temporada con opción a una más, consolidando así un movimiento estratégico del club lombardo para fortalecer su proyecto de cara a la próxima campaña en Serie A. El mediocampista croata, de 39 años, llega como agente libre tras 13 años en el Real Madrid, donde ganó 28 títulos, entre ellos seis Champions League y cuatro Ligas.
Modric fue recibido con entusiasmo en Milán, completando el reconocimiento médico y posando ya con la camiseta rossonera, con el dorsal 14 en honor a Johan Cruyff, durante su anterior etapa en la Premier League. El centrocampista expresó en un video oficial: “Muy contento de estar aquí para empezar un nuevo capítulo en mi carrera”.
El entrenador Massimiliano Allegri y la dirección deportiva han subrayado la llegada de Modric como esencial para elevar el nivel competitivo del equipo tras la decepcionante octava posición sin acceso a torneos europeos en la última temporada. Contará con compañeros de calidad como Youssouf Fofana, Yunus Musah, Rubén Loftus‑Cheek y Samuele Ricci, último fichaje por 23 M€. Modric aportará veteranía, manejo de balón y liderazgo.
El contrato contempla un salario neto anual de 3.5 millones de euros, con variables incluidas y la posibilidad de renovar hasta junio de 2027. El objetivo es claro: mantenerse en forma de cara al Mundial de 2026 y ayudar al Milan a alcanzar nuevamente la élite continental.
Tras anunciar su adiós al Real Madrid en mayo, Modric participó en la semifinal del Mundial de Clubes ante el PSG. Su nueva etapa en Italia busca prolongar su legado con la selección croata, de la que es capitán y máximo referente histórico, con 188 apariciones internacionales.
Esta incorporación refuerza la apuesta del Milan por combinar juventud y experiencia en su centro del campo. Modric debutará oficialmente en la Copa Italia ante el Bari y se espera que debute en Serie A el 23 de agosto frente al Cremonese, marcando así el inicio de una temporada ambiciosa en San Siro.
